Just Fontaine fue el primer gran goleador de la historia de Francia, la primera gran estrella que tuvieron Les Bleus y que alcanzó su cumbre en el Mundial del 58. Fontaine tuvo una actuación deslumbrante en ese Mundial, aunque no la pudo culminar levantando el trofeo. Quizás sea esa una de las razones por las que Just Fontaine no es a día de hoy tan conocido como otros galos como Zidane o Platini. Y es que Fontaine se quedó en varias ocasiones a las puertas de conseguir alzar trofeos importantes, tanto a nivel internacional como con sus clubes. No solo eso, sino que además tuvo que decir adiós al fútbol de manera prematura debido a las lesiones. Sin embargo, nosotros vamos a darle la importancia que merece y vamos a repasar los hitos de un jugador mítico como lo es Just Fontaine.
Una carrera brillante a nivel de clubes
Pese a jugar toda su vida profesional para Les Coqs, Just Fontaine nació en Marrakech, Marruecos, en 1933. Además, su padre era francés pero la madre era española. En Marruecos vivió toda su infancia y comenzó su andadura como profesional en el US Casablanca. Allí despuntó tanto que, pese a ser una liga inferior, acabó recalando en Niza y llegó al fútbol de élite con 20 años, en 1953. Después de dos temporadas infructuosas en cuanto a títulos se refiere, Fontaine ganó la liga y la copa en último año con el Niza.
Aunque no fue la piedra angular de ese Niza campeón del doblete, firmó una buena temporada con el equipo de la Costa Azul. Ello le valió a Fontaine para fichar por el Stade Reims que, aunque a día de hoy no sea tan conocido, en aquellos años era el indiscutible referente del fútbol francés. En el Reims, Fontaine se erigió como líder del proyecto y en seis temporadas ganó tres ligas y una copa. Sin embargo, en 1959 perdieron la final de la Copa de Europa contra el mismo equipo contra el que perdieron la final en 1956: el Real Madrid, con Di Stéfano, Kopa, Gento… Aún así, esa derrota no empañó el grandísimo torneo que hizo, en el que acabó siendo el máximo goleador de la edición.
Un adiós prematuro
En sus últimas temporadas en el Stade de Reims sufrió varias fracturas en la pierna izquierda. Todo ello le llevó a tener que decir adiós al fútbol prematuramente a una edad en la que los futbolistas de hoy en día están en su “prime”. Por eso, a los 28 años, Just Fontaine colgó las botas sin llegar a mostrar todo su potencial. Pero, aún así, lo demostrado hasta entonces le permitió estar entre los jugadores con más gol de todos los tiempos.
La actuación de Fontaine en el Mundial del 58
El Mundial del 58 de Suecia ha pasado a la historia principalmente por ser el primero que ganó Brasil con un estelar y jovencísimo Pelé. Sin embargo, en este campeonato Just Fontaine rompió récord que nadie ha podido batir hasta la fecha. El jugador francés marcó un total de ¡13 goles! en sólo un Mundial y se consagró como uno de los mejores del mundo. Esta cifra es muy representativa del gol que tenía Just Fontaine y más si observamos detenidamente la lista de máximos goleadores históricos en la Copa del Mundo (masculino).
La lista está compuesta por unos pocos futbolistas que han sido capaces de hacer magia con su selección en el escenario más grande posible. El el alemán Miroslav Klose, es el jugador que más veces ha metido el balón en la red rival, con 16 tantos. Seguido, está Ronaldo, O fenómeno, con un gol menos que él. En el último escalón de este podio de leyenda, encontramos a Fontaine que, sin hacer mucho ruido en cuanto a fama se refiere, está por encima de iconos del fútbol como Pelé, Gerd Müller o Lionel Messi.
Pero, lo realmente impactante de todo esto es que, mientras la mayoría de futbolistas están en esta lista después de haber jugado tres, cuatro, cinco mundiales, Just Fontaine lo consiguió en… ¡uno! El mítico delantero necesitó tan solo seis partidos oficiales en el Mundial del 58 para marcar trece goles. Hasta la fecha, son suficientes para ser, de momento, el mejor francés a nivel goleador en la historia de la competición. Ah, y lo más curioso de todo es que Fontaine logró ese récord ¡con unas botas que no eran suyas! Y es que el delantero las perdió en la celebración de los títulos conseguidos en 1958 con el Stade de Reims. Por eso, un compañero de equipo, Stephan Bruey le dejó las suyas para jugar el Mundial de Suecia.
A pesar de todo, la estrella Kylian Mbappé, a un gol de igualar a Fontaine, tiene todo a favor para consagrarse como máximo goleador histórico en la próxima Copa Mundial… El tiempo dictará sentencia.